Y es que Sagitario aviva el fuego de nuestra curiosidad, de nuestras ganas de descubrir y buscar disfrutar y pasarlo en grande. Estamos en buena sintonía con los que nos rodean, sean conocidos o no y podremos expandir nuestras perspectivas y grupos de amigos. Es la ocasión ideal para conocer personas nuevas que puedan aportar cosas bonitas a nuestra vida y compartir con ellas y con los que ya están con nosotros todas nuestras ilusiones y proyectos.
Sagitario nos alza a creer nosotros mismos a confiar en nuestro potencial, sabe como lograr las cosas a través de su gran optimismo y positividad. Es tiempo de soltar las riendas, de librarnos de limitaciones y poner el corazón en todo lo que hagamos con fe absoluta en un grandioso resultado. ¡Arriesga y gana, pero no te excedas! Ríe, baila, canta, viaja, haz excursiones, ve a un concierto o festival, lee, contrasta información que haga crecer tu espíritu, ve a charlas sobre temas en los que te interese profundizar, conversa, discute y debate con otros tus opiniones innovadoras sobre cualquier cosa, sé tu misma/o en cualquier circunstancia, diviértete como nunca, cualquier experiencia que tengas será inolvidable.
Aquellas personas que en el momento de su nacimiento tenían la luna en el signo de Sagitario, independientemente del mes en que nacieran, saben y confían en su futuro. Conocen la sensación de la seguridad completa, de saber que todo puede solo ir a mejor. Sé conocen valientes, resolutivos y eficaces, capaces de saltar con agilidad y rapidez cualquier obstáculo, como montados a caballo.
Son, sobretodo, optimistas, entusiastas. Este continuo buen humor y esperanza ciega en que todo irá genial les hace de amuleto ante cualquier negatividad, pues su aura se expande y crean una coraza de protección infranqueable con su positividad. Con lo que siempre suelen conseguir lo que se proponen, de una forma u otra.
Por otra parte son personas muy libres, necesitan sentir la libertad en todo momento, cualquier compromiso o circunstancia o persona que los limite les hastía y amarga profundamente. Conocen el viento en su cara, el sol en su piel, no están dispuestos a renunciar a ellos por nada. Les encanta viajar, los deportes en montaña, las excursiones y todo lo que sea explorar y descubrir.
Son apasionados cuando defienden sus ideas y valores, no aceptan que nadie cuestione los cimientos de sus opiniones y les cuesta cambiar de opinión, aunque escuchan las opiniones de los demás, suelen discutirlas con dureza si no se ajustan a sus pensamientos.
(Entrada creada por Verónica Moliher para el blog Seres de Luz)
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